26/1/12

(Foto: Kirtan en la India)



El valor de las Tradiciones

La palabra “tradición” por definición del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española significa: Transmisión de noticias, composiciones literarias, doctrinas, ritos, costumbres, etc., hecha de generación en generación.


Literalmente se puede decir que es la enseñanza que se entrega de un grupo a otro, y que a menudo es como la historia pequeña, aquella que no se encuentra generalmente en los libros de texto, que los pueblos o gentes transmiten y conservan de padres a hijos y, que se nutre a través de su práctica y del sentimiento que encierra para las personas que las secundan, sin un cuestionamiento muchas veces del porqué se llevan a cabo e igualmente sin sensación de obligación.


Son el eslabón que nos une con algún aspecto de nuestros orígenes más íntimos, dependiendo de la tradición de que se trate, es decir, con nuestro pasado y el de nuestros antepasados que nos las legan.


Especialmente destacan las tradiciones populares, que conforman nuestra historia cultural o adoptamos por sentimiento e identificación y, por medio de las cuales nos identificamos con un grupo social determinado con el que se ha compartido y se comparte una experiencia o enseñanza traída por nuestros antecesores.


Estas de paso nos hacen sentir orgullosos al vincularnos a un lugar y a unas personas determinadas compartiendo y transmitiendo una enseñanza o experiencia.


Yo especialmente las considero como el abrigo que te aporta el calor de la integración a un entorno familiar, cultural, social, religioso, etc. que te da unidad y protección.


En general, las tradiciones dependiendo de qué campo se trate suelen estar muy arraigadas, aunque con los cambios sociales, económicos, culturales, etc. muchas de ellas corren el peligro de desaparecer, pero en gran parte son meritorias y encierran la sabiduría de un grupo humano por lo que son parte de nuestro patrimonio humano y personal.